En el año 2007 el mundo sufrió una crisis generalizada que afecto a un sin número de empresas y generó el colapso de varias instituciones financieras. Sin duda, esta dura crisis impactó a la industria del fútbol. Las ligas más importantes del mundo se encuentran en crisis y con deudas enormes. Por ejemplo, la Premier League considerada la liga más importante del planeta tiene una deuda superior a los 5 mil millones de dólares, lo cual representa el 56% de la deuda de los equipos europeos. Como si fuera poco, el 47% de los equipos europeos pierde dinero, a pesar de generar una cifra record de ingresos. Por eso la UEFA piensa tomar duras medidas para acabar con esta situación. Si una industria multimillonaria como el fútbol, no logra producir los recursos suficientes para los respectivos clubes es una clara indicación de que algo anda mal.

Pueden ser los salarios galácticos que los jugadores, entrenadores y dirigentes reciben, o bien los contratos televisivos y publicitarios que no remuneran lo suficiente a los clubes. Los modelos de gestión también pueden ser otros causantes del problema, ya que por ejemplo la mayoría de sociedades anónimas se están destruyendo o producen pérdidas millonarias. O finalmente, la relativamente nueva reglamentación de la FIFA sobre los derechos deportivos del jugador, que llevo a una des-capitalización del club. Pero sin duda existe algún problema en el fútbol para que esto ocurra.

Los casos latinoamericano o ecuatoriano no son más alentadores. River Plate y Boca Juniors de Argentina, dos de los clubes que más jugadores exportan a Europa se encuentran en una crisis económica enorme. Lo mismo ocurre con otros equipos considerados grandes del continente y en el Ecuador ocurre exactamente igual: la mayoría de los equipos tienen problemas económicos y para solventarlos apelan al crédito para existir. Como ejemplo tenemos a Barcelona que tiene una deuda de 14 millones de dólares, el Quito con 6 millones y el Nacional con 3 millones, entre otros.

La Federación Ecuatoriana de Fútbol también se encuentra en crisis, ya que ni si quiera puede contratar al director técnico de la selección nacional. Mucho más si se toma en cuenta que a inicios de este año se hizo una millonaria alianza con el grupo Credife para que patrocine el campeonato por los próximos 5 años y de los importantes ingresos provenientes de los derechos de televisión, auspicios y taquilla.

¿Estos datos prueban que el fútbol no es un negocio para los clubes? ¿El gran movimiento económico y la alta liquidez que tiene el fútbol a quién beneficia? ¿Las sociedades anónimas funcionan en el fútbol? ¿No sería bueno transparentar el manejo económico-financiero del fútbol ecuatoriano antes que sea tarde?